Hola, soy Miguel, higienista dental en IDI.

Después de más de diez años en el sector, he visto muchos casos de problemas dentales provocados por el bruxismo. Este mes vamos a hablar sobre el bruxismo y una manera fácil y rápida de prevenir las consecuencias del mismo, utilizando una férula de descarga.

Una vez que hemos terminado con el verano y las vacaciones, volvemos a la rutina y el vértigo diario de actividades sin parar. Durante estos días vacacionales te has dado cuenta de que tus dolores de la articulación temporomandibular (atm), de cervicales, cabeza, incluso la sensibilidad dental han disminuido. Entonces te has acordado de que, la última vez que fuiste al dentista, éste te recomendó que utilizaras una férula de descarga y has pensado que a lo mejor tenía razón.

Muchas veces el origen de todos estos dolores lo encontramos en el estrés y la ansiedad provocado porque cada día tenemos más obligaciones y exigencias en el trabajo, en los estudios, los hijos, el hogar,…  Aunque no seamos conscientes de ello, el estrés está estrechamente relacionado con enfermedades bucodentales. Cuando dormimos, nuestro cuerpo se relaja y expulsa toda la tensión acumulada durante el día y una de las formas utilizadas por nuestro organismo es apretando los dientes o rechinándolos. Este mecanismo, llamado bruxismo, es muy perjudicial para nuestros dientes y para el aparato masticatorio. El bruxismo desgasta poco a poco los dientes, llegando a tener sensibilidad dental o incluso a fracturar alguna pieza. También puede ser causa de artrosis en la articulación de la mandíbula.

Una manera muy sencilla de identificar si apretamos los dientes es observándonos mientras estamos en una posición de relajación, como viendo la televisión, paseando o conduciendo, nuestra boca debe permanecer ligeramente abierta, sin que lleguen a tener contacto los dientes, que sería la posición correcta, de lo contrario sería un signo de bruxismo.

Si te has decidido por utilizar una férula, te voy a hacer algunos comentarios que tal vez debas saber.

Utilizar una férula no es cómodo, tiene un período de adaptación de unos días. Al tener un cuerpo extraño en la boca puedes notar sequedad bucal o más salivación, te despertarás con la sensación de incomodidad y muchas veces te la quitarás. También puedes notar presión en los dientes. No obstante, los beneficios de utilizarla son tantos que merece la pena ese sacrificio inicial y una vez te acostumbras a utilizarla dejarás de notar las molestias.

Las principales ventajas del uso de la férula son evitar las consecuencias del bruxismo, mejorando los dolores articulares y musculares del conjunto cara-cabeza-cuello. También evitamos el desgaste de las piezas dentales.

Una férula es un protector dental diseñado de forma personalizada y dependerá de la anatomía de cada uno. Para hacer una férula se toma unos moldes de la arcada inferior y superior del paciente y unos registros de la mordida. Una vez en el laboratorio se confecciona. Hay muchos materiales en el mercado pero la férula de descarga tiene que ser de un material rígido, ya que debe soportar mucha presión durante su utilización. Si se fabrica con un material blando no cumplirá con la función para la cual se destina. La colocación de la férula finaliza con un ajuste oclusal en la boca del paciente.

Utilizar la férula es muy sencillo, simplemente tendrás que colocártela con ayuda de los dedos, evitando morderla durante su colocación ya que puede haber riesgo de rotura o dañar alguna pieza dental. Es aconsejable mojar la férula antes de colocarla en la boca para una mejor inserción.

El cuidado de la férula es fácil. Únicamente hay que limpiarla diariamente con un cepillo dental duro, jabón neutro y enjuagarla con agua. Para mayor limpieza y desinfección se puede utilizar semanalmente pastillas efervescentes específicas para la limpieza de prótesis dentales.

Una férula no es para toda la vida. El desgaste producido en la férula aconseja renovarla cada cinco años. No obstante, si tenemos algún cambio en las piezas dentales (empastes, extracciones,…) tendremos que revisarla por si hay que ajustarla o renovarla. Deberemos llevar la férula a nuestra revisión anual en el dentista para comprobar que tiene un buen ajuste oclusal porque de lo contrario podría ser perjudicial para la articulación.

Como conclusión, con una férula de descarga puedes cuidar tu salud dental mientras duermes.